Tecnología para adultos mayores
Internet aterrizó en España a finales del siglo pasado, tímidamente a finales de los 80s y para el gran público a mediados de los 90.
Internet ha cambiado muchas cosas, nos ha permitido comunicarnos de muchas maneras nuevas, a través del correo electrónico, de la mensajería, como el WhatsApp, o las redes sociales.
Ha cambiado los dispositivos de comunicación que utilizábamos, el teléfono, y han desaparecido las cabinas telefónicas, están desapareciendo los teléfonos fijos, casi todo el mundo ya tiene un teléfono móvil, y muchos de ellos son ya smartphones, con conexión a Internet.
También nos ha proporcionado acceso a una cantidad inmensa de información, a través de los navegadores, como Firefox, Chrome, etc. y los buscadores, como Google. Casi cualquier duda que nos surja la podemos resolver buscando en Internet.
Ha cambiado a los propios ordenadores personales, que cada vez se utilizan menos, ya que se ven sustituidos por los propios smartphones y las tablets. Está cambiando la TV, que nos está empezando a llegar por Internet en lugar de por la antena.
Ha cambiado como hacemos las cosas, ya podemos hacer casi cualquier trámite con las administraciones públicas desde casa, por Internet, o ponernos en contacto con el servicio técnico de cualquier aparato sin descolgar el teléfono.
Podemos comprar un billete de avión o de tren o reservar un hotel por Internet, comprar toda clase de artículos, e incluso hacer la compra por Internet.
Tanto es así que la gente joven, que se ha criado en este mundo, se enfada cuando quieren hacer algo y no lo pueden hacer por Internet, ya que lo dan por hecho, mientras que una buena parte de los mayores SE LO ESTÁ PERDIENDO.
Porque escribo sobre tecnología para la tercera edad
Me acabo de pre-jubilar y, aunque la foto de portada me parece que refleja una situación muy atractiva, ¡tener tiempo!, no tener prisa, poder pasar el rato, no llegar tarde, no tener que terminar algo, …, lo cierto es que también tengo ganas de hacer cosas.
Y os preguntaréis que hago escribiendo un Blog sobre tecnología para la tercera edad.
Desde que estoy en esta situación ha ganado presencia la situación de mi madre, con 86 años, a la que ya no tengo excusa para prestar (mucha) mas atención (lo mismo le ocurre a mi pareja con la suya).
Sigue viviendo en su casa, sola (mi padre falleció hace ya 10 años) como le ocurre al 20,8% de los mayores de 65 años, y a mas del 30% de los mayores entre 85 y 94 años, según las estadísticas del IMSERSO de 2012.
Y esto, a su edad, le coloca en una situación de vivir EN DEPENDENCIA, pero no solo a ella, a mi también, y es que la situación de dependencia, no solo es para el que tiene que depender de los demás, sino también para los FAMILIARES que tienen la obligación de ayudar a un familiar dependiente, y aún mas, lo es también para los CUIDADORES profesionales.
Es curioso, aunque la situación de dependencia hacia nuestros padres empieza ya en nuestra madurez, cada vez es más habitual que los que nos ocupamos de nuestros padres seamos a su vez adultos mayores también, o estemos cerca de serlo, y podamos estar creando a la vez situaciones de dependencia hacia nosotros mismos.
Más del 80% de los mayores de 65 años prefieren vivir en su casa, mientras no necesitan cuidados, pero, llegada esta situación, solo el 15% prefiere seguir en su casa, la mayoría, el 45%, prefiere vivir en casa de familiares, y un 20% prefiere una residencia o una urbanización para la tercera edad.
Un adulto mayor que vive solo se enfrenta a un número de retos en su día a día, y necesita ayuda de sus familiares, aunque no vivan con el. Empezamos hace tiempo con las gestiones, los bancos, la declaración de la renta, etc (los papeles). Seguimos con los arreglos en la casa, los médicos, las medicinas, y, finalmente, cuando ya no ha podido llevar adelante su día a día, los cuidadores.
Por otra parte, como me decía un viejo profesor, yo mismo ya me enfrento a la tercera edad, y, lo que hoy puede ser una manera sana de ocupar mi tiempo, y simplificar mi vida, en no mucho tiempo puede ser mi propia necesidad. Estoy ya cerca de los 60!
Porque tecnología
Después de trabajar 32 años en una empresa tecnológica, no me queda otra que aplicar la regla del martillo de oro, y, aunque no pienso que todos los problemas se pueden solucionar con tecnología, si que creo que la tecnología, para la tercera edad, puede ayudar a suavizar algunos de los problemas.
En concreto, la tecnología en si misma, es ya un reto para los mayores. Mi madre tiene un móvil ya desde hace unos años, que, por lo general NO usa.
Parece que hemos conseguido convencerla de que si no lo tiene cargado no funciona, y parece que muy recientemente empieza a darse cuenta que si no se lo lleva encima cuando sale de casa, luego no lo puede usar, ni le pueden llamar, pero tampoco le preocupa y no es lo habitual que se lo lleve.
Me cuesta pensar en verla manejando un smartphone, pero quien sabe, si le viera la utilidad …
Aun así, aun con el conocimiento de que la resistencia de la tercera edad a la tecnología es alta, y que la de los mas maduros tampoco es demasiado baja, creo que la tecnología puede y debe ayudar a facilitarnos nuestro día a día con las limitaciones que nos imponen las dependencias.
Y ¿porque lo haces gratis?
No es que lo haga gratis, ¡es que me cuesta dinero!
Todos esperamos hoy que cualquier cosa en Internet sea gratis, especialmente cuando se trata de información, como es este caso.
Así que no me plantearía un proyecto como este de otra manera, si no lo hiciera así sería con toda seguridad un fracaso.
No obstante, me gustaría pensar que en algún momento dejara de costarme dinero y fuera capaz de mantenerse por si mismo, e incluso que llegase a pagar por mi esfuerzo.
¿Y como lograr esto?
Pues siguiendo las estrategias clásicas para este tipo de páginas, básicamente, publicidad y venta de productos.
La publicidad está siempre claramente identificada en estas páginas con la palabra PUBLICIDAD, de manera que no hay lugar a error.
Y la venta de productos está basada en enlaces a productos en tiendas on-line.
Cuando reviso productos en mis artículos y creo que algunos son recomendables, y no al revés, suelo incluir un enlace a una tienda on-line donde podéis comprarlo y me pagan comisiones de venta, sin coste para el cliente.
Así que, si queréis ayudarme a mantener este blog, y os interesa comprar algún artículo que veis a través de estas páginas, hacedlo a través de los enlaces de estas, no os costará mas dinero.
Reconocimientos:
Foto de portada por Arnel Hasanovic en Unsplash
Foto del teléfono con dial por Annie Spratt en Unsplash
Foto del smartphone por Saulo Mohana en Unsplash
Foto de persona mayor sola por Nick Cooper en Unsplash
Foto de una persona tecleando en un portátil por Steve Buissinne en pixabay
Foto del dinero por Freddie Collins en Unsplash